Las concesiones mineras no metálicas que operan al norte del país contribuyen con la generación de fuentes de trabajo de forma directa e indirecta, mediante encadenamientos productivos.
La concesión Shobol Norte 1, ubicada en el sector de San Juan y operada por la Unión Cementera Nacional (UCEM), genera alrededor de 390 fuentes de empleos.
La planta de UCEM emplea procesos de fabricación de materiales para la construcción como el hormigón.
Por su parte, la concesión Shobol Central, operada por la Asociación de Canteras Shobol Central compuesta por 71 socios. Esta empresa se dedica a la producción colectiva de hidróxido de calcio (cal agrícola y óxido de calcio, que se emplea en la construcción); así como del klinker, un tipo de ladrillo que se caracteriza por su durabilidad y dureza.