Estudio sobre pensiones en minería revela que sistema de reparto podría aumentar hasta en 196% la jubilación de trabajadores del sector

Tomado de: https://www.elmostrador.cl/
El informe elaborado por la Fundación Sol para la Federación de Sindicatos de Supervisores Minería Privada (Fesumin),  descarta la idea de que el sistema dominado por las administradoras de fondos de pensión es mejor que el de reparto, en el caso de las rentas estables y medias altas percibidas en el sector minero. Según Iván Mlynarz, director de estudios de la entidad, generalmente la discusión previsional se centra en personas con lagunas o con bajos ingresos y el informe viene a aportar  información fidedigna para la discusión.

La Federación de Sindicatos de Supervisores Minería Privada (Fesumin), en conjunto con la Fundación Sol, realizó un estudio sobre la situación de las pensiones en el sector, el cual entrega evidencia que desmiente la idea de que las AFP son una mejor opción para las rentas estables y medias altas de la minería chilena.

De acuerdo a los resultados, «es evidente que para los ingresos medios altos, es decir, cerca de $2,4 millones al mes, el sistema de reparto es superior al sistema actual».

Entre las principales conclusiones del informe se encuentra que las pensiones en un sistema de reparto son un 51,1% mayores a las rentas vitalicias para los hombres en el sistema de AFP. En el caso de las mujeres, estas son 196% mayores.

Además, de acuerdo al estudio, en un sistema de reparto, las pensiones son 30% mayores que el retiro programado. Y en el caso de las mujeres es 147%.

Ambos cálculos fueron realizados considerando la primera pensión recibida, ya que las pensiones de retiro programado se reducen en el tiempo. En cambio, las rentas vitalicias mantienen su valor, pero tienen un monto inferior a la primera pensión de los retiros programados.

El informe destaca que, a diferencia de los resultados del sistema de AFP, los montos del sistema de reparto se logran sin recurrir a fondos de ahorro voluntario APV o depósitos convenidos. «Esto permitiría disponer de un fondo de ahorro de entre $11 y $46 millones al momento del retiro», destacan.

Además, se señala que al incorporar bonificaciones por Trabajo Pesado y por Trabajo No Remunerado, el sistema de reparto permite una jubilación anticipada efectiva. Por tanto, aseguran, la edad de jubilación puede reducirse hasta en 10 años, obteniendo montos de pensión superiores a los del sistema de AFP.

La variable género

Iván Mlynarz, director de estudios de la Federación de Sindicatos de Supervisores Minería Privada, explica que la realización del informe fue vital, debido a «la ausencia de información fidedigna que uno pueda creer en esta discusión».

Asegura que generalmente la discusión se centra en personas con lagunas o con bajos ingresos y no en el sector minero, donde las rentas son altas y estables. «Frente a esto buscamos una alternativa. El informe ayuda a llenar esta ausencia, a hacer una mirada del sector que representamos, y a contar información fidedigna. Este informe puede ser contrastado con la información que nos pueda entregar la Asociación de AFP, el Gobierno y los parlamentarios».

A pesar de que las conversaciones tras el informe aun no decantan en algo concreto, Iván Mlynarz sostiene que «hay datos que fueron importantes, como la discriminación por género».

«Hoy día planteamos a las mujeres en minería que sus futuras pensiones van a ser más bajas que la de sus colegas, pero ninguna de las propuestas actuales, con excepción del sistema reparto, se hace cargo de esta situación», añadió.

Según el director de estudios de Fesumin, las propuestas de mejoras al sistema de AFP «son muy marginales». A su juicio, «las pensiones son malas y van a seguir siendo malas aunque aumentemos los montos que hoy se ponen en AFP porque el sistema se proyecta con rentabilidades bajas en el futuro. Y por eso hay que salir y buscar alternativas mixtas que puedan tener un sustento y una perspectiva de largo plazo de mejores pensiones que las que hoy día se ofrecen».

«La gente que se jubila de la minería con mucho dinero en la AFP está teniendo que reducir sus ingresos a un cuarto, y a veces a un quinto, de lo que estaba ganando en su ultimo sueldo a su primera jubilación. Y ese es un salto muy grande para cualquier bolsillo, más aún cuando en Chile la vejez no tiene ningún tipo de apoyo. Hay que seguir pagando las enfermedades y una serie de servicios con pensiones que van a ser un quinto de la remuneración. Se hace complicado para los colegas que se están jubilando y para nosotros en el futuro», concluyó.