La justicia falló a favor de Galápagos

Ecuador, dictó sentencia contra el líder de una red de tráfico de vida silvestre.

Paúl Tapia, de 38 años, fue condenado a tres años de cárcel y una indemnización de USD 670 mil por traficar tortugas galápagos luego de tres años de una denuncia en contra de este ciudadano líder de una red de tráfico de vida silvestre.

En el mercado internacional, las tortugas galápagos cuestan miles de dólares y la red delictiva transportó aproximadamente 150 crías de tortuga desde las Islas Galápagos hasta Perú y China, escondidas en fondeaderos de barcos comerciales que partieron desde Guayaquil.

Tapia estaba a cargo de un criadero de tortugas en las islas Galápagos, cuando más de un centenar de estas desaparecieron.

El tribunal absolvió a los cómplices de Tapia, pues la Fiscalía argumentó su dictamen en la falta de pruebas para la incriminación.

En Galápagos, las especies se trafican en lanchas o en embarcaciones comerciales, se presumen que con esta modalidad se han comercializado ilegalmente al menos 150 tortugas chelonoidis guntheri y chelonoidis vicina, ambas clasificadas como en “peligro crítico de extinción”.

Fuente foto: Ministerio del Ambiente

B.M.