Rosalía Arteaga Serrano, Ecuatoriana, ha ocupado los cargos de Presidenta y Vicepresidenta Constitucional de la República del Ecuador, siendo la primera mujer en hacerlo. Además, ha desempeñado roles importantes como viceministra de Cultura y ministra de Educación, Cultura y Deportes.
En la actualidad, ejerce como presidenta ejecutiva de la Fundación FIDAL y es miembro de la Academia Mundial de Artes y Ciencias. Entre sus responsabilidades adicionales, forma parte del Consejo Directivo de la Biblioteca de Alejandría en Egipto y ostenta el título de miembro de honor de la Real Academia de Doctores de Europa. Asimismo, desempeña el papel de Alta Comisionada de la Panamazonia en Manaos, Brasil, entre otras funciones relevantes.
En su espacio como columnista en el medio de comunicación, expresó su enfoque acorde a lo que sucederá en las próximas semanas, el gobierno entrante en Ecuador enfrenta un conjunto de desafíos cruciales. Uno de los más apremiantes es la preservación de la dolarización como el régimen monetario del país. Este sistema ha sido un baluarte de estabilidad frente a la volatilidad política y económica.
La población reconoce la imperiosa necesidad de mantener este sistema, pero la economía ecuatoriana enfrenta desafíos preocupantes. La disminución de las ventas de petróleo, la disminución del turismo debido a la inseguridad y la falta de alternativas de ingresos amenazan la sostenibilidad de la dolarización.
En este contexto, el desarrollo de la minería a gran escala y responsable podría ser una de las pocas salidas viables. Los productos mineros son altamente demandados en el mercado global, y otros países compiten por obtener metales preciosos. Sin embargo, en Ecuador, se ha priorizado la minería artesanal e ilegal, a pesar de las consecuencias sociales y ambientales adversas que conlleva, así como su vínculo con el lavado de dinero del narcotráfico.
El nuevo gobierno, con menos de dos años en el cargo, se enfrenta a la tarea de tomar medidas y estrategias que aborden estos desafíos. Una de las posibles soluciones es acelerar la efectivización y aplicación de los tratados de libre comercio ya en curso, que buscan fortalecer las relaciones comerciales entre Ecuador y países como China, Corea y Costa Rica. Esto podría ayudar a aumentar el comercio y generar la tan necesaria estabilidad que la población espera.
El reto que enfrenta el nuevo gobierno es monumental. Los ecuatorianos están atentos para ver cómo el joven mandatario afronta los desafíos desde los primeros días de su mandato. Ecuador es un país rico en recursos, pero también es complejo y atraviesa conflictos significativos. La capacidad del gobierno para abordar estos desafíos será fundamental para el futuro del país.
C.A.