Con la inmovilización de maquinaria de extracción de minerales y la colocación de sellos de prohibición de labores, la Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales No Renovables (ARCERNNR) y Fuerzas Armadas «controlaron», la explotación minera ilegal a cielo abierto de grava aurífera que se ejecutaba en el río Yacuambi.
Moradores del sector ya no se sorprenden pues la provincia es uno de los platillos favoritos de la minería ilegal que goza de la inacción de los controles, mismos que no registran detenidos.