Los precios del níquel escalaban un 15% a su límite superior de cotizaciones y el zinc y otros metales industriales también subían el miércoles, cuando interrupciones provocadas por el conflicto entre Rusia y Ucrania y valores más altos de la energía avivaban el temor por la escasez.
El níquel de referencia en la Bolsa de Metales de Londres se disparaba casi 3,000 dólares en un lapso de unos 20 minutos y mantenía la ganancia del 15% a las 1200 GMT en 32,380 dólares la tonelada.
“El mercado del níquel todavía está tratando de encontrar su lugar”, dijo Geordie Wilkes, jefe de análisis de la corredora Sucden Financial. “Se esperaría más volatilidad en el corto plazo con baja liquidez, bajos inventarios, márgenes más altos e incertidumbre sobre el conflicto en Ucrania, lo que hace que este sea un entorno comercial muy complicado”.
Los volúmenes generales en la LME eran más bajos de lo habitual, en un momento en que muchos inversores se mantenían al margen, dijeron operadores. Sin embargo, los volúmenes de níquel de 3,000 lotes estuvieron en gran medida en línea con otros metales importantes, lo que sugiere que el mercado estaba comenzando a volver a la normalidad tras dos semanas de caos.
El principal centro de comercialización de níquel del mundo sufrió un aumento récord de precios el 8 de marzo, una suspensión de operaciones de seis días y luego un reinicio afectado por fallas técnicas después de que lanzó límites de precios por primera vez.
En otros metales, el zinc ganaba un 2,8% a un máximo de dos semanas de 3.997,50 dólares la tonelada, en un contexto de preocupaciones sobre nuevas suspensiones de fundiciones en Europa debido a los altos precios de la energía.
Mopani Copper Mines de Zambia informó el miércoles un segundo accidente fatal en tres días en la mina. Como resultado, la actividad en la operación se ha visto interrumpida. Mientras, TRIMET, con sede en Alemania, se convirtió en la última fundición en reducir la producción de aluminio en Europa debido a los precios más altos de la energía.
El aluminio en la LME ganaba un 1,4% a 3,552 dólares por tonelada, el cobre subía un 0,7% a 10,335 dólares, el plomo sumaba un 2,2% a 2,326,50 dólares y el estaño ascendía un 0,5% a 41,615 dólares la tonelada.