Los precios del cobre repuntaban el miércoles a medida que disminuían los temores de que la variante ómicron del coronavirus debilite la demanda de metales industriales.
A las 1125 GMT, el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subía un 1% a 9.535 dólares la tonelada tras perder un 0,6% en noviembre.
Una transformación ecológica a vehículos eléctricos y turbinas eólicas, además de nuevos proyectos de infraestructura, requerirá más cobre incluso si una pandemia en expansión genera restricciones más estrictas, según Ole Hansen, de Saxo Bank.
“Esos proyectos no van a desaparecer aunque veamos una caída en el crecimiento nuevamente o un período de menor movilidad”, dijo el estratega.
“Además de eso, los niveles de inventario siguen siendo muy bajos”, agregó.
Los metales se beneficiaban además de un mayor apetito por el riesgo por parte de los inversores.
El Senado chileno avanzó el martes en la discusión de un controvertido proyecto de ley para ampliar las regalías a las mineras que operan en el mayor productor mundial de cobre, impulsado por diputados de oposición.