Los precios del aluminio y el zinc subían el martes, ya que la preocupación por las disrupciones en el suministro por los altos precios de la electricidad estimulaban las compras, pero las ganancias eran limitadas por el alza del dólar y la variante ómicron del coronavirus, que se está extendiendo con rapidez.
A las 1034 GMT, el aluminio referencial en la Bolsa de Metales de Londres subía un 1,1%, a 2,839 dólares la tonelada, tras ganar más del 40% el año pasado, mientras que el zinc mejoraba un 0,5%, a 3,553 dólares, tras avanzar un 28% en 2021.
“La historia de la energía y la escasez (de aluminio y zinc) van a estar con nosotros durante un tiempo”, dijo una fuente de la industria. “Los inventarios ya son bajos y va a salir más metal de los almacenes (registrados en la LME)”.
Los altos precios de la energía y las disrupciones ya eran un problema en China, antes de que Indonesia -el principal exportador del carbón utilizado en las centrales eléctricas y el mayor proveedor extranjero de China- prohibiera las exportaciones para enero.
La subida del dólar hace que los metales cotizados en el billete verde sean más caros para los tenedores de otras divisas, lo que podría reducir la demanda.
En otros metales básicos, el níquel a tres meses subía un 0,6%, a 20,880 dólares la tonelada; el cobre cedía un 0,9%, a 9.635 dólares; el plomo bajaba un 0,4%, a 2,295 dólares; y el estaño restaba un 0,2%, a 38,795 dólares.