Han transcurrido 15 días desde la última vez que se vio con vida a la abogada María Belén Bernal, quien fue asesinada mediante asfixia y estrangulamiento presuntamente por su esposo, el teniente Germán Cáceres, en la Escuela de Policía de Quito.
El atroz asesinato causó conmoción en el país y aunque los restos óseos de la mujer fueron encontrados el 21 de septiembre en el cerro de Casitagua, a minutos de la Escuela de Policía, la investigación continúa en curso, para lo cual los familiares solicitaron la participación de expertos internacionales.
Este femicidio develó las falencias de la institución policial y causó el repudio nacional. Tras los hechos, el presidente de la República, Guillermo Lasso solicitó la renuncia del ministro de Interior, Patricio Carrillo, por el tratamiento dado al caso y exigió resultados en una semana que conduzcan con el paradero de Cáceres.
Desde la desaparición y posterior encuentro del cadáver de la abogada, organizaciones sociales, colectivos feministas y gremios se han movilizado a nivel nacional con plantones, marchas y protestas, cómo medida de rechazo a lo sucedido y para alzar la voz por todas las víctimas.
Además, exigen al Gobierno politicas de prevención y erradicación de violencia contra la mujer. Hasta inicios de septiembre se contabilizaron 207 casos de femicidios en el país en lo que va de año.