Este sábado 1 de abril, Guillermo Lasso, presidente del Ecuador anunció tres nuevas medidas de seguridad que se implementarán para combatir la delincuencia, el narcotráfico y el crimen organizado en el país.
El primer punto que ha generado gran controversia entre los ecuatorianos es la modificación del decreto que permite la tenencia y porte de armas, es decir que en términos generales:
Se autoriza la tenencia y porte de armas de uso civil para defensa personal de acuerdo con los requisitos de ley y el reglamento, también se permite el uso de aerosoles de gas pimienta para defensa personal, se prohíbe el registro y tenencia de armas artesanales, se realizarán controles y registro informático todo coordinado por La Secretaría de Seguridad Pública. Además, los guardias de seguridad privada apoyarán a la Policía Nacional en las tareas de vigilancia y seguridad, portando sus armas en puestos de trabajo.
Como segunda medida mencionó que se instaló el Puesto de Mando Unificado en Guayaquil, liderado por el presidente, y rotando en las provincias de Santa Elena y Los Ríos.
Y como tercera acción decretó estado de excepción en la zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), Santa Elena y Los Ríos. El toque de queda regirá a partir de la 01h00 a 05h00, desde este 2 de abril.
Haciendo referencia a la primera medida el libre porte de armas es un riesgo que incrementará la violencia e inseguridad, no es una solución al terror que enfrenta la población. Guillermo Lasso, desde su posición acepta que el Estado es incapaz de protegernos causando indignación entre la población. Según él «una guerra entre ustedes y los delincuentes». La seguridad ciudadana es responsabilidad del Estado, no de las personas armadas.
Realizamos una petición a que el gobierno busque soluciones efectivas y sostenibles a la crisis de seguridad en Ecuador y mostramos total rechazo a esta medida nombrada “cruzada por tu seguridad”.
Australia donde estuvo vigente el libre porte de armas, las matanzas aumentaron, por ello ese gobierno, en lugar de apostar por el espectáculo, decidió restringir. Acá el Gobierno de Ecuador, no aprende de las lecciones ajenas ni propias, es pues un país experimental.
A.Ch.